Show sidebar

No se encontraron productos que concuerden con la selección.

Nace en Calzada de Calatrava, provincia de Ciudad Real, partido judicial de Almagro y Arzobispado de Toledo, en los años cincuenta. A los ocho años emigra con su familia a Extremadura. Allí estudia el Bachillerato Elemental y Superior, con los Padres Salesianos y los Franciscanos, despectivamente. Su mala educación religiosa sólo le enseñó a perder la fe en Dios. Por esa época, en Cáceres, comienza a ir al cine, compulsivamente.
A los dieciséis años se instala en Madrid, solo, sin familia y sin dinero, pero con un proyecto muy concreto: estudiar y hacer cine. Imposible matricularse en la Escuela Oficial de Cine, Franco acababa de cerrarla. Ya que no puede aprender el lenguaje (la forma), decide aprender el fondo, y se dedica a vivir. Son finales de los 60, a pesar de la dictadura, Madrid supone para un adolescente provinciano la ciudad de la cultura y la libertad. Trabaja en múltiples y esporádicos trabajos, pero no puede comprarse su primera cámara de superocho hasta conseguir un empleo “serio” en la Compañía Telefónica Nacional de España. Permanece doce años como auxiliar administrativo. Estos años suponen su verdadera formación. Por la mañana (desde muy temprano) está en contacto con una clase social que de otro modo no habría conocido tan a fondo: la clase media española en el inicio de la época del consumo. Sus dramas y sus miserias. Todo un filón para un futuro narrador. Por la tarde-noche escribe, ama, hace teatro con el grupo Los Goliardos, rueda películas en superocho mm. Colabora con distintas revistas underground. Escribe relatos, algunos se publican. Es miembro de un grupo punk-rock paródico, Almodóvar y Mcnamara, etc.

Tiene la suerte de que el estreno de su primera película en cines comerciales coincida con el nacimiento de la democracia española. Después de año y medio de azaroso rodaje en 16 mm., estrena en 1980 “Pepi, Luci, Bom…” A partir de este momento el cine se convierte en su segunda naturaleza. Escribe y dirige. Y vive, lo suficiente para poder seguir inventándose historias que estén vivas.

Sus películas se estrenan en los cines de todo el mundo.